miércoles, 23 de noviembre de 2011

CARTA 02

El amor se expone frontal, en susurros íntimos al oído y en gritos directos de una apasionada carta. También puede demostrarse sin hablar de él mismo. Simplemente con escuchar como se le niega a otro, se descubre un amor lleno y grande para un tercero, que ni sabe de esa carta.

Carta de Manuelita Sáenz (amante de Simón Bolívar) a su esposo James Tohrne (*)
No, no y no; por el amor de Dios, basta. ¿Por qué te empeñas en que cambie de resolución? !Mil veces no! Señor mío, eres excelente, inimitable. Pero, mi amigo, no es grano de anís que te haya dejado por el general Bolívar; dejar a un marido sin sus méritos no sería nada. ¿Crees por un momento que después de haber sido amada por este hombre durante años, de tener la seguridad de que poseo su corazón, voy a preferir ser la esposa del Padre, del Hijo o del Espíritu Santo, o de los tres juntos? Sé muy bien que no puedo unirme a él por las leyes del honor, como tú las llamas, pero, ¿crees que me siento menos honrada porque sea mi amante y no mi marido? Déjame en paz, mi querido inglés. Amas sin placer. Conversas sin gracia, caminas sin prisa, te sientas con cautela y no te ríes ni de tus propias bromas. Son atributos divinos, pero yo miserable mortal que puedo reírme de mí misma, me río de ti también, con toda esa seriedad inglesa. !Cómo padeceré en el cielo! Tanto como si me fuera a vivir a Inglaterra o a Constantinopla. Eres más celoso que un portugués. Por eso no te quiero. ¿Tengo mal gusto? Pero, basta de bromas. En serio, sin ligereza, con toda la escrupulosidad, la verdad y la pureza de una inglesa, nunca más volveré a tu lado…

(*) Simón Boívar, no sólo conquistó ejércitos y terrenos, en su tarea militar y política para liberar América. Sus hazañas entre las mujeres fueron famosas y envidiadas. Se le reconocen 8 amantes formales. La historia no pudo retener el número ni los nombres de la tantísimas otras mujeres que lo amaron a escondidas o en silencio. La última de sus mujeres oficiales fue Manuelita Sánez, autora de esta carta.

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